El pasado jueves 20 de Junio en la Sala Dreams BCN disfrutamos del primer encuentro organizado por Domina Musa dirigido principalmente a la gente bisexual que, al igual que ella, disfruta incorporando las diversas prácticas que nos ofrece el mundo del BDSM en sus juegos sexuales. Asistieron varios Dominantes, algunos con sus propios sumisos y sumisas, parejas que incorporan el BDSM en su relación, y un buen número de chicos bisexuales y crossdressers que lucieron sus mejores galas fetichistas. Especial mención y agradecimiento requiere la presencia de nuestros amigos Amo Estepario y Lady Brishen, practicante del FemDom como Domina Musa.
A lo largo de toda la tarde, el séquito de sumisos feminizados adoraron y sirvieron al grupo de Dominantes. Todos fueron azotados hasta que sus culos quedaron bien enrojecidos y marcados para recordarles su Rol y obligada obediencia desde el inicio del encuentro. Dentro de la Mazmorra Dreams BCN, todos fueron desfilando sobre el potro de tortura, para seguir siendo azotados y sodomizados por el strap-on de Domina Musa. Ella, metida de pleno en su travestido papel de “macho dominante y maltratador” durante aquella tarde, disfrutó como una loca obligando a todos los sumisos a chupar su polla de goma negra y a entregarle voluntariamente su ano para ser violados mientras les insultaba y azotaba sin piedad como a las zorritas sumisas que tanto les gustaba representar.
Lady Brishen y Domina Musa abusaron de un sumiso a dúo durante un perverso y memorable momento del encuentro. Mientras Lady Brishenforzaba cruelmente el ano del sumiso con sus dedos, Domina Musa le obligaba que le chupara su falo de goma sin descanso, ignorando los sonoros gemidos de placer y dolor que apenas dejaban respirar al sumiso que obedecía como podía.
En resumen, a pesar del agotamiento para Domina Musasometiendo y sodomizando a tantos sumisos en una sola tarde, pero visto el éxito del encuentro y lo divertido y morboso que fue para todos los asistentes, repetiremos seguro. La sonrisa de placer y felicidad con las que acabaron todos los sumisos no tiene precio.
